Esta narración... increiblemente fue un sueño que tuve hace mucho tiempo y publiqué en otro sitio, el día 28 de abril del año 2008, con el título: Almas Solitarias.
(Acabo de confirmar... el sueño fue el día 08 de febrero del 2008)
Hoy, por "casualidad" lo leo de nuevo...
Y no puedo, más que sorprenderme... por lo que este sueño encierra...
La sincronicidad no toma en cuenta ni tiempo, ni espacio... definitivamente.
Era una chica pava, muy coqueta…. Fui a la panadería como todas las mañanas a comprarme un café.
Y lo vi, fue la primera vez. Fue un encuentro inusual, pero que marcó nuestras vidas para siempre…
Salí de allí, con la sensación de haberlo amado por siempre…
Decidí entrar a trabajar en ese lugar, sólo para estar a su lado… Era un amor correspondido, éramos felices… Viviendo y sintiendo a cada momento este amor, casi celestial.
Hasta que un día, simplemente dejamos de vernos… sus amigos me retiraron su amistad.
El ambiente se tornó tan incómodo para mí. Me sentía mal, no era merecedora de su amor, le había hecho tanto daño…
Tiempo después, el destino cruza nuestros caminos…
En una de las reuniones semanales con mis amigas en un club famoso… Lo vi… estaba tan apenado… hizo un gran esfuerzo por verme a los ojos…
En un instante, que estuvo solo… Se acercó a mí, me abrazo por la espalda y me susurró al oído: TE QUIERO MUCHO.
No pude más… que voltearme… abrazarlo con fuerza y decirle TE AMO.
Nuestros corazones latieron tan fuerte, al mismo ritmo. Fue un momento súblime…
Hasta que su esposa volvio… Él, ahora… también estaba casado…
Lo vi, darme la espalda e irse de mi vida para siempre…
Era nuestro destino en esa vida…
Estar separados… a pesar de amarnos profundamente…
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